Según la revista Forbes, hay casi una docena más de líderes
multimillonarios en el planeta, tanto elegidos democráticamente como déspotas.
Ante muchos de ellos incluso las más grandes riquezas de América Latina
palidecen, aun cuando los 25 magnates de la región serían capaces de pagar con
sus fortunas casi toda la deuda argentina o igualar lo que 15 millones de
chilenos producen en un año.
La riqueza de los 587 multimillonarios del orbe (64 más que en 2003) llega a US$
1.900.000 millón, un 20% de la producción de Estados Unidos.
Jefes de gobierno y líderes
Dinero y poder es lo que define el perfil de casi una veintena de líderes
mundiales, con fortunas que van desde US$ 1 millón (el canciller alemán Gerhard
Schroeder) hasta los US$ 25.000 millones del rey de Arabia Saudita. Los hay
demócratas, monárquicos, dictadores y déspotas; el común denominador es que son
millonarios. Un dato curioso es que a tres de los cuatro más ricos entre quienes
lideran las siete mayores potencias del mundo se los relaciona con casos de
corrupción: Silvio Berlusconi (Italia, US$ 10.000 millones); Paul Martin
(Canadá, US$ 225 millones) y Jacques Chirac (Francia, US$ 9 millones). Pudiente
es también el presidente de EE.UU., George W. Bush, con US$ 15 millones a su
haber. Los "pobres", además de Schroeder, son Tony Blair (Reino Unido, US$ 3
millones) y Junichiro Koizumi (Japón, US$ 2 millones). En tanto, el haber de los
líderes de Arabia Saudita, Emiratos Arabes Unido, Brunei y Dubai, acumula una
riqueza conjunta de US$ 69.000 millones, similar al PIB de Chile. Los polémicos
Yasser Arafat y Fidel Castro poseen fortunas por US$ 200 millones y US$ 150
millones, respectivamente.
El líder cubano obtiene sus beneficios de las ventas de ron
Havana Club a la compañía francesa Pernod Ricard, en
1993
La Reina Isabel de Inglaterra ha visto caer su riqueza en pocos años, desde US$
1.000 millones a US$ 660 millones el año pasado. El "déspota", como lo llama
Forbes, del paraíso fiscal Liechtenstein, Hans Adam II, no sólo puede contratar
y despedir al gobierno, elegir jueces y vetar leyes, sino que gastar sus US$
2.200 millones.
Mujeres y escándalos
La ilegalidad también reporta ganancias, y para algunos
resulta buen negocio. Es el caso de la ex convicta por 18 meses Leona Helmsley,
por evasión de impuestos. Ya libre, puede despilfarrar un fondo de US$ 2.200
millones.
Otro conocido evasor y criminal de cuello y corbata, Marc Rich, disfruta en
Suiza de sus US$ 1.100 millones, tras ser perdonado por Bill Clinton. Tras las
rejas, pero alegando inocencia, están los magnates petroleros rusos Mikhail
Khodorkovsky (US$ 15.000 millones) y Platon Lebedev (US$ 1.800 millones).
Un divorcio los arruino
El dinero va y viene. Algunos millonarios han perdido casi toda su fortuna en un
solo, tras dividir la riqueza en la familia, divorciarse o por causas del
mercado. El taiwanés Koo Chen-fu y el suizo Christoph Blocher pasaron de haberes
por US$ 1.400 millones en 2003 a US$ 200 millones y US$ 130 millones,
respectivamente. Robert Johnson (Black Entertainment Television, en EE.UU.) se
despidió de US$ 500 millones al divorciarse, casi la mitad de su dinero.
|