Con el anteproyecto de reforma presentado ayer por la ministra
de Educación y Ciencia, María Jesús San Segundo, a las Comunidades Autónomas,
son ya cuatro las reformas educativas desde 1990, aunque ninguna de las tres
anteriores ha sustituido por completo a la anterior y no ha alterado
sustancialmente la estructura original.
La LOE, de aprobarse, sustituirá a la LOGSE (1990), LOPEG (1995) y la LOCE
(2002), pero no a la LODE (1985), que fue aprobada también por un Gobierno
socialista y que verá como algunos de sus apartados siguen en vigor mientras
recupera ciertos aspectos de las otras tres leyes de la anterior etapa
socialista
Sin embargo, si nos atenemos al gran cambio que se produjo en España tras la
llegada de la democracia, esta será la sexta "gran ley" de la educación.
Demasiados cambios en tan poco tiempo que no han conseguido sus objetivos,
aumentar la calidad de la enseñanza y mejorar la formación de los alumnos, algo
fundamental en una sociedad moderna.
Año 1985: LODE
Esta ley mantenía la estructura EGB-BUP que reguló la Ley General de Educación
del 70, que sustituyó a la centenaria Ley Moyano de 1857 e introdujo la
obligatoriedad y gratuidad de la educación hasta los 14 años.
Incorporo grandes novedades como el sistema de colegios concertados y contempló
por primera vez la figura del consejo escolar, que permitía a profesores,
alumnos, padres y personal administrativo a participar en la gestión de los
centros públicos.
Año 1990: LOGSE
Cinco años después, el Gobierno socialista impulsó la LOGSE, que trajo consigo
la escolaridad obligatoria hasta los dieciséis años, el descenso de 40 a 25
alumnos por clase o la aparición de profesores especializados para asignaturas
como el inglés, la música o la gimnasia.
Su implantación se realizó de forma progresiva y dividió los ciclos académicos
en Educación Infantil (0 a 6 años), Educación Primaria (6 a 12 años); Educación
Secundaria Obligatoria, ESO, (de 12 a 16 años) y Bachillerato, ciclo no
obligatorio que iba desde los 16 a los 18 años. Esta ley supuso el fin de la EGB
La LOGSE tardó dos años en ponerse en marcha, fundamentalmente por un problema
de financiación, y el escolar que empezara entonces en Infantil (0 a 6 años)
convivió con los que estudiaban, provenientes del sistema de la LODE, de 1985,
la EGB.
La nueva Ley implantaba además los ciclos de Primaria (6 a 12 años), ESO (de 12
a 16 años) y Bachillerato (16 a 18 años, aunque no obligatoria).
La asignatura de Religión y su alternativa eran evaluables pero no computables y
no había que repetir curso por muchos suspensos que se tuvieran.
Hasta el curso 1997/1998 convivieron la ESO y la EGB, el de 2000/2001 fue el
último de BUP y los últimos que cursaron COU lo
hicieron en 2001/2002.
Año 1995: LOPEG
Mientras la LOGSE comenzaba a andar, en 1995 se aprobó la LOPEG, una ley sobre
la gestión y gobierno de los centros que, entre otros aspectos, otorgaba a los
colegios una mayor autonomía y obligaba a los concertados a admitir a alumnos
pertenecientes a minorías sociales.
Año 2002: Reforma de la LOGSE, llega la LOCE
Así las cosas, en 2002 se aprobó una nueva reforma educativa, que recibió el
nombre de Ley Orgánica de Calidad de la Educación (LOCE), a la que precedieron
la Ley Orgánica de la Participación, la Evaluación y el Gobierno de los Centros
Docentes (LOPEG), la Ley Orgánica de Universidades (LOU) y la Ley Orgánica de
las Cualificaciones y de la FP (LOCFP).
La LOCE contemplaba que la Religión y su alternativa fueran computables a
efectos de la nota media y la obtención de becas; que los itinerarios empezaran
en la ESO para dirigir a los alumnos hacia la Universidad u otros estudios; y el
establecimiento de la reválida.
Año 2004: Paralización de la LOCE por victoria socialista
La victoria socialista en las elecciones del 14 de Marzo del 2004 supuso una
paralización de la aplicación de la nueva ley de educación promovida por el
Partido Popular por un periodo de dos años.
Rodríguez Zapatero paralizó la introducción de los itinerarios en la Educación
Secundaria Obligatoria y Bachillerato, que dirigían a los alumnos hacia la
universidad u otros estudios, así como la incorporación de refuerzos para
alumnos con carencia de conocimientos en matemáticas o inglés, que llegaba
incluso al desdoblamiento de aulas.
También se suspendía la aplicación de una nueva reválida al final del
Bachillerato, la Prueba General de Bachillerato, cuyo suspenso reducía las
salidas del alumno a la Formación Profesional, cuyo acceso también exigía pasar
una prueba.
El nuevo Gobierno socialista, además, suspendió el nuevo tratamiento para la
Religión, asignatura que la LOCE convertía en evaluable y computable para la
nota mediaSin embargo, se destaca que la nueva ley del
gobierno Zapatero ha mantenido algunos aspectos de la anterior ley. Los
alumnos que ahora tienen 15 años seguirán estudiando la ESO, no tendrán
itinerarios pero sí "desdobles", ni una asignatura de Religión computable aunque
sí evaluable.
Ya este curso no podrán repetir más de una vez, una medida que ya entró en vigor
al acabar 2003/2004. |