El gobierno del presidente George W. Bush informó ayer
miércoles que está investigando el ataque realizado contra los
principales servidores de internet, aunque restó importancia a
rumores de que fue obra de terroristas.
"Una investigación se lleva a cabo para determinar quién es
el responsable de los ataques", dijo el portavoz de la
Casa Blanca, Ari Fleischer.
Pero cuando se le preguntó si se sospechaba que fue obra del
ciberterrorismo, Fleischer respondió: "No tengo
conocimiento de que haya algo que pudiera conducir en esa
dirección. La historia ha mostrado que muchos de estos ataques
proceden de la comunidad de ciberintrusos".
"El ataque del lunes fue único, ya que fue dirigido a los
servicios de nombres de dominio", dijo Fleischer.
El sistema de nombres de dominio -que coteja los largos
códigos numéricos que usan las computadoras para identificar
las computadoras conectadas con las direcciones de la Web que
la gente escribe- y los servidores de raíz de los que depende
para la información de direcciones, han sido considerados hace
tiempo el talón de Aquiles de la Internet, capaces de cerrar
la Internet si son atacados.
"Pero el método del ataque no fue nada nuevo. Hubo alguna
alguna degradación de servicio. Sin embargo, nada falló y los
proveedores pudieron mitigar los ataques muy rápidamente",
agregó.
Fleischer dijo que la división cibernética de la FBI tenía
conocimiento de los ataques que ocurrieron, y ayudó a los
esfuerzos de Estados Unidos para mejorar la seguridad de la
Internet en coordinación con el sector privado.
"Muchas nuevas protecciones han sido puestas en su lugar.
Existe un reconocimiento de que la Internet es una parte vital
de nuestra economía y la economía del mundo", dijo
Fleischer.
sábado mayo 24, 2014