La polémica con los números 906 viene de lejos y tuvo su momento más algido durante el pasado año cuando diversas organizaciones de consumidores denunciaron su proliferación en ámbitos como ofertas laborales y los ya famosos "dialers" de internet.

Entre Agosto y septiembre del 2001, la OCU denuncio la existencia de más de 1000 números 906 al considerar que los servicios que ofrecian debían de ser prestados por las líneas 903, de acceso restringido previa solicitud del abonado.

En su reclamación ante el Consejo de Consumidores y Usuarios (CCU) y la Secretaria de Telecomunicaciones, incluía un buen número de paginas Web que ofrecían dialers que sorteaban la conexión habitual del usuario para realizarla a través de un número inteligente con tarificación mucho más elevada.

La OCU ponía como ejemplo el caso de una empresa en la ofrecía a propietarios de paginas Web la posibilidad de disponer de un 906 propio, sin más requisitos que incluir en su página un enlace con la de esa empresa. En la publicidad de una de estas direcciones se avisa de "lo fácil que es conseguir hasta 75 pesetas por minuto de conexión" y lo que hay que hacer para que los visitantes de esa Web descarguen "un dialer" (fichero ejecutable que le facilitan).

Contemplando en su demanda ante la Secretario de Telecomunicaciones, la posibilidad de proceder contra aquellas empresas que derivan las conexiones de internet hacía números 906.