Dos de los principales competidores de Sogecable y Vía Digital manifestaron
ayer una profunda preocupación por el impacto que representará para el mercado y
la industria televisiva la fusión de ambos grupos.
Telecinco consideró que el Gobierno "no ha evitado" con sus 34 condiciones a la
autorización de la fusión de Vía Digital y Canal Satélite Digital, "el monopolio
de los contenidos" y que, técnicamente, "la operación resulta esencialmente
inaceptable", según informa en un comunicado.
El canal televisivo aclara que aún está "estudiando y valorando" los
requisitos, así como "las medidas futuras a adoptar", asegura en su nota
que las 34 condiciones anunciadas por el Gobierno son, "en realidad", "las
mismas diez que fueron filtradas a la prensa la pasada semana". La cadena
privada precisa que ya expresó en un anterior comunicado que el voto particular
de todos los integrantes técnicos del Tribunal de Defensa de la Competencia "es
unánime al convenir que la operación resulta esencialmente inaceptable,
calificación técnica que Telecinco mantiene".
"De hecho -afirma-, las dos condiciones principales que Telecinco había
reivindicado no han sido contempladas" y precisa que estas son que Sogecable
no pudiera comprar derechos en abierto, "extremo éste que las actuales
condiciones permiten", y que se estableciera "la libertad de acceso a la
plataforma monopolista".
Las actuales condiciones, añade, permiten a Sogecable "comprar derechos para sí
misma y también derechos en abierto", y de ellas "se desprende" que no existe
libertad de acceso "para cualquier operador que quiera emitir un canal a
través de la nueva plataforma satisfaciendo los costes técnicos, exceptuando los
canales estrictamente informativos".
Por su parte la operadora de cable ONO no ha tardado en responder a
la decisión del Gobierno. Según esta empresa las condiciones a la operación
"consolidan el control de la televisión de pago por parte de Sogecable al
reforzar su posición de dominio en el mercado de acceso a los contenidos".
Al no limitar cuanto menos las exclusivas a la emisión por satélite, "el
Gobierno se puede jactar ahora de contribuir a poner en peligro la viabilidad de
ONO y la del cable en general que como se sabe constituye la única alternativa a
la empresa fusionada en el mercado de la televisión de pago".
ONO va a estudiar todos los recursos posibles a esta decisión que
compromete las inversiones multimillonarias realizadas para crear una red
alternativa a la del operador dominante.
Quienes prefirieron esperar para hacer publica su posición el grupo de
telecomunicaciones AUNA, concesionaria de servicios de cable en importantes
demarcaciones, y la Agrupación de Operadores de Cable, ambos contrarios, en
principio, a la fusión, pero que esperarán a estudiar en profundidad las
condiciones impuestas por el Gobierno.
sábado mayo 24, 2014