Angel Cortés -Dicen sus defensores que Pique trato, en su breve periodo, de consolidar esta cartera de reciente creación, avanzando hacia la plena liberalización de las telecomunicaciones y buscando crear una nueva mentalidad científica en el país. Sin embargo, los resultados reales en ese terreno han sido mínimos y aunque el tiempo no ha dado para más, la mayoría han quedado en simples propuestas que han quedado sin aprobarse o llevarse a la practica.

Pique llegaba al Ministerio junto a la polémica "Ley de Servicios y Sociedad de la Información", más conocida como LSSI, promovida por su antecesora en el cargo. Esta norma había sido contestada por la mayoría de los integrantes del sector y el nuevo ministro intento calmarlos ampliando el plazo para su puesta en marcha. Es aún difícil saber si realmente esta normativa se ha aplicado en toda su extensión, aunque la sensación generalizada es que es una "ley muerta" que será sustituida por alguna nueva como una Ley de Comercio Electrónico.

También recibió el varapalo de los internautas al no impulsar una decidida reducción del precio de la banda ancha en España, fundamental para que esta tecnología llegase a un mayor número de hogares. Mientras en Europa, por el mismo precio se ofrece una mayor capacidad de transmisión, en nuestro país se sigue ofreciendo la ADSL más cara y más lenta. Hay que destacar que el Gobierno autorizó una reducción del precio de este servicio, aunque Telefónica (el operador dominante) no la aplico. Para el próximo año, anunció antes de abandonar el Ministerio una reducción... aunque se teme que esta solo será aplicada cuando la competencia apriete.

Pique ha propiciado el plan "españa.es", que sustituirá al Info XXI impulsado por su antecesora. Destinado a fomentar la Sociedad de la Información, asociaciones sectoriales le han negado autoridad al haber sido realizado sin haber contado con su participación y reproducir los mismos tics que el plan al que ha sustituido

En el ámbito de las telecomunicaciones, flexibilizó el sistema de precios máximos de Telefónica, el llamado Price Cap, para eliminarlo totalmente en el 2005. También se comprometió a que el Gobierno a partir de esta fecha no intervendrá en la fijación de precios del antiguo monopolio. Una afirmación contrarestada ayer mismo, por otro alto cargo, quien aseguró que el Gobierno seguirá "regulando" el precio del abono mensual de una u otra manera.

Tampoco consiguió que la liberalización significará una mayor competencia en el sector y además redujo en móviles los avales exigidos para el lanzamiento de la tercera generación que aún no se sabe cuando llegará a España. Usuarios critican que las operadoras alternativas a Telefónica encuentran más cómodo comprar minutos a estas y después revenderlos que invertir en redes propias que significaran una mayor competencia.

Dos tecnologías en los que se apostó decididamente al principio de la legistura, la LMDS y el cable, parecen haber quedado fuera de las preocupaciones del Ministerio. Paradójicamente, ambas son las que podrían haber plantado cara a la presencia dominante de Telefónica en el sector, al concentrar aún más del 75% del mercado debido principalmente a su extensa red y su capacidad para llegar a la casa de cualquier abonado.

En el terreno positivo se ha optado por abrir los contratos de los servicios de telecomunicaciones de las Administraciones Públicas para que puedan optar a ellos otros operadores además de Telefónica y se ha revisado el marco legal de las infraestructuras comunes de telecomunicaciones en los edificios para adaptarlo a la evolución tecnológica.

En general, Piqué ha defendido el aumento de la capacidad comercial e inversora de las operadoras para lo que ha abogado también por las fusiones empresariales.

En el ámbito legislativo, se ha aprobado la Ley de la Firma Electrónica y se debate en el Parlamento la nueva Ley General de Telecomunicaciones, que incorpora el paquete de directivas comunitarias sobre comunicaciones electrónicas. Deja sin embargo, tareas pendientes que se fijo el propio Ministro, como la aprobación del Plan Estratégico del Desarrollo de la Banda Ancha y el de Televisión Digital Terrenal que se estudia con el sector, así como la consecución de una competencia real en la telefonía fija

Su mandato ha sido también el de la fusión Digital de las plataformas de TV y el de la desaparición de la única Televisión Digital Terrestre de ámbito estatal, Quiero TV, "abandonada por todos (accionistas y gobierno) a su suerte", según dijeron los trabajadores de esa extinta cadena en su momento.

En este mismo ámbito, Piqué ha intentado sin éxito sacar adelante la Ley de lo Audiovisual, por lo que únicamente se incluirán algunos aspectos en la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos Generales del Estado para el 2004.


Materia científica


En materia científica, la otra gran pata del Ministerio, Piqué deja encarriladas diversas cuestiones, que, si bien no llegará a concluir, han ocupado gran parte de su tarea al frente de este departamento. Entre ellas, las principales son la candidatura española para albergar el Centro Internacional de Investigación de Fusión (ITER) en Vandellós (Tarragona), el Estatuto del Becario y el nuevo Plan Nacional de I+D+I (2004-2007).

Durante la crisis por el vertido del petrolero del Prestige, el Ministerio se ocupó de crear un comité de "sabios" para estudiar la situación y determinar cuáles eran las posibles soluciones al buque hundido, de las que finalmente ninguna se aplicará.

Desde que llegó a esta cartera, se ha enfrentado a las críticas por la falta de fondos y por la situación del sistema de Ciencia y Tecnología, a las que siempre ha respondido aludiendo a las mejoras de los últimos años. La candidatura española para albergar el ITER pasa ahora por una de las fases "clave", ya que el día 23 de este mes la Comisión Europea decidirá qué ciudad, si Vandellós (Tarragona) o Cadarache (Francia), competirá con Japón y Canadá.

El hasta ahora ministro heredó de su antecesora las negociaciones para mejorar las condiciones de los jóvenes investigadores, que han desembocado en el "Estatuto del Becario de Investigación", pendiente de aprobación y que sigue sin satisfacer a los afectados.

Para Piqué, España necesita un tupido tejido científico, y por ello el nuevo plan nacional de I+D+i, que se aprobará en enero, "ayudará a introducir una nueva mentalidad", con una especial importancia a los incentivos fiscales y ayudas a las empresas que inviertan en investigación y desarrollo. Sin embargo, parte de la comunidad científica se muestra muy crítica con la situación del sistema de ciencia y tecnología, posición que un grupo de 1.700 científicos hizo pública en una carta en abril pasado. Entonces, Piqué admitió el "retraso", pero insistió en que "las cosas han mejorado muchísimo" y ahora "hay más científicos y recursos que nunca". Respecto del uso de los embriones congelados procedentes de la fecundación in vitro, Piqué asegura que "se siente cómodo" con la modificación de la Ley de Reproducción Asistida presentada recientemente por el Ministerio de Sanidad.