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FAES y la conspiración por Pablo Sebastián |
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Por Pablo Sebastián
La Estrella Digital
Se llevan mal entre ellos, se culpan los unos a los otros de la pérdida del
poder, pero al final todos aparecen enganchados a la noria del fatídico 11M y
empujan en la misma y única dirección: todo fue una conspiración para que el PP
perdiera el poder, había unas tramas ocultas que se subieron al carro del
terrorismo islámico y que estaban dirigidas por personas y cerebros cercanos a
la vida española, nada de líderes fundamentalistas ocultos en remotos desiertos
y lejanas montañas, como dijo Aznar en la Comisión del 11M. Y toda esta trama,
de la que no se descartan misteriosas conexiones con los GAL de los tiempos
felipistas, fueron creando el ambiente de la “mentira oficial” del último
gobierno del PP, y el PSOE sacó las turbas a la calle y produjo la intimidación
en vez de la jornada de reflexión, y así el 14 de marzo del pasado año el PP
perdió el poder.
Ése es el mensaje en el que coinciden los propagandistas del PP y sus diarios y
radios afines, sin el menor matiz ni disimulo, y ése es el mensaje que el ala
dura del PP, que a la vez estuvo implicada en los días del 11 al 14M, Acebes y
Zaplana, repite de manera machacona, siguiendo las instrucciones de su jefe
Aznar, ¡ni un paso atrás!, que ayer desde su búnker de FAES, donde día a día
revive con amargura “el hundimiento” de su régimen de poder, lanzó el vídeo de
la conspiración, de la marca Rodríguez —pequeño aprendiz del diablo Goebels—
con la intención de sumar esfuerzos y acusaciones con vistas al día del cierre
de la Comisión del 11M. Y a las conclusiones de la misma, que con la sola
excepción del PP acusará al Gobierno de Aznar de errores muy graves en la
prevención del terrorismo islámico, como los que ya se conocen, de mentir
acusando a ETA de los atentados del 11M hasta la noche del 13M, y de haber
llevado a España a la guerra de Iraq, la excusa de los criminales para atacar
Madrid.
El PP no se rinde, a lo hecho pecho, insiste en lo imposible y no quiere
reconocer sus flagrantes errores y responsabilidades y se han unido todos como
una piña, y esta vez han convencido a Rajoy para que lidere las diversas
teorías conspirativas que pongan en evidencia o en cuarentena la victoria
electoral de Zapatero de hace un año. Rajoy quiso quedarse al pairo empeñado en
pasar la página y mirar hacia el futuro y molesto por su marginación en los
días del atentado por parte del gabinete de crisis, en el que sí estaban
Zaplana y Acebes. Rajoy, por no estar, ni siquiera estuvo presente en el
Congreso de los Diputados el día en el que Aznar articuló su bronca
declaración.
Pero algo ha pasado en el PP, o todos han coincidido en que la mejor defensa es
un ataque y por ello aunque el diario El Mundo, que lidera la conspiración,
odia y maltrata a Aznar, en esta fase conspirativa están de acuerdo con él. De
la misma manera que lo está Aznar con Rajoy, a pesar de que el ex presidente se
queja en privado de la debilidad con la que su sucesor ejerce la labor de la
oposición. Ahora se han subido todos al barco conspirativo y sólo Gallardón
sigue a su aire y recordando a quien quiera oírlo que hay errores que se deben
reconocer.
Errores y mentiras por doquier, por más que el PSOE aprovechara ambas cosas en
las vísperas electorales del 14M, pero el poder lo perdió el autoritario y
desconcertado Aznar al que se le cayó el mundo encima el 11M, intentando huir
por el callejón de las mentiras para luego ser cazado en la jornada electoral,
después de haber despreciado la colaboración de todas las fuerzas políticas y
sistemas de seguridad —incluso el CNI— y de haber desoído meses atrás las
advertencias sobre el terror islámico y los riesgos de la presencia de España
en la guerra de Iraq.
A dónde va con toda esta orquesta de ruidos el PP? Puede que a ninguna parte, o
más bien a seguir rodeado de los propios fantasmas que les hicieron perder el
poder. Pero una vez más lo importante no es el futuro sino el salvarle la cara
a Acebes y Aznar, y Rajoy por fin parece haber accedido a estas pretensiones
empujado por la COPE (que ya se ha cargado a Rouco) y por El Mundo, que pronto
planteará un nuevo líder para el PP (tras las elecciones vascas y gallegas, ya
lo verán). El PP, con FAES a la cabeza, se mete de cabeza en la conspiración
cuando a Zapatero le crecen los enanos por todas partes, en Cataluña, País
Vasco y en la política exterior. Pero el presidente tiene suerte porque con
todo este maremoto de los populares carece de verdadera oposición.
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sábado, 24 mayo 2014 |
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